¿Por qué experimentamos cierta seducción por las simetrías, las repeticiones, los vaivenes cíclicos, como el estribillo de una canción o un aniversario que termine en cero?
Uy! Enrique y yo que ya ando tomando la simbología del Fénix pa unos ajustes en mi aldeana vida. Ya la carta astral que me hizo Madame Sazú ya no me convence mucho, como que mi signo Aries nomás no me da.
Eso de los logos es interesante. Cuando los diseñadores de Nike presentaron el Swoosh, los expertos le diagnosticaron un fracaso total precisamente por ser asimétrico y denotar cierto movimiento. Al parecer, el Swoosh muestra la presencia de una nueva sensibilidad, distinta de la "clásica".
Ah, y en cuanto a las repeticiones o ciclos, nos seducen porque acotan el tiempo y el espacio, dándonos noción de éstos, y por ende dándonos conciencia de la vida. Este principio es lo que nos atrae a la naturaleza, a la música, a la arquitectura, a la poesía: el ritmo.
7 comments:
por razones evolutivas
atte. ockham
según algunos entendidos en las artes esotéricas, el fin del mundo será hoy en cuanto termine el debate.
Los astros pronostican que el fin del mundo puede acontecer si cierto Rayito de esperanza toma la presidencia de cierta república bananera...
Uy! Enrique y yo que ya ando tomando la simbología del Fénix pa unos ajustes en mi aldeana vida. Ya la carta astral que me hizo Madame Sazú ya no me convence mucho, como que mi signo Aries nomás no me da.
Pero tá mejor eso que la susodicha cifra, ¿no?
Eso de los logos es interesante. Cuando los diseñadores de Nike presentaron el Swoosh, los expertos le diagnosticaron un fracaso total precisamente por ser asimétrico y denotar cierto movimiento. Al parecer, el Swoosh muestra la presencia de una nueva sensibilidad, distinta de la "clásica".
Es 6, 6, 2006. No veo la simetría.
Ah, y en cuanto a las repeticiones o ciclos, nos seducen porque acotan el tiempo y el espacio, dándonos noción de éstos, y por ende dándonos conciencia de la vida. Este principio es lo que nos atrae a la naturaleza, a la música, a la arquitectura, a la poesía: el ritmo.
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